La capital del Gran Ducado destila encantos por doquier que puedes descubrir en una escapada de fin de semana. Lo primero que verás, una vez haya aterrizado tu vuelo a Luxemburgo, es el valle del Pétrusse. Recorrido por el río del mismo nombre y cruzado por el puente Adolphe, constituye una auténtica explosión de verdor.
Callejear por el casco antiguo te adentrará en el corazón histórico de la ciudad y te hará percibir su singular trazado urbano, salvado por rampas y desniveles, dividido en la Ville Haute, ciudad alta, y la Ville Basse, ciudad baja. Además, verás espectaculares joyas monumentales, como la iglesia de San Ulric o la torre de Jacob.
Las casamatas del Pétrusse son una visita ineludible durante tu fin de semana en Luxemburgo. Este conjunto kilométrico de galerías y pasadizos subterráneos fue construido durante la ocupación española, en el siglo XVII, y te permitirá conocer un fragmento de la historia de la ciudad. Si te quedan ganas de más, visita las del Bock, que recorren todo el Luxemburgo subterráneo.
Luxemburgo acoge algunas instituciones europeas, aglutinadas en el barrio Europeo, como el Banco Europeo de Inversiones o el Tribunal de Justicia. Pasear por él te permitirá ver una bonita colección de edificios de vanguardia, que ejercen el contraste perfecto con los monumentos del casco antiguo. Para captar la esencia de la ciudad, hay que pasear por la Corniche, el paseo que bordea la ciudad alta con hermosas vistas al valle de Alzette y al animado barrio de Grund, y por el balcón más bonito de Europa.
Culmina de forma elegante tu fin de semana en Luxemburgo visitando la catedral gótica de Notre-Dame y el palacio Ducal, residencia oficial del Gran Duque.
Luxemburgo es una ciudad pequeña rebosante de grandiosidad, ante la que es imposible no caer rendido. Mira nuestras promociones de vuelos de Madrid a Luxemburgo y déjate seducir por su eterno encanto reservando un vuelo + hotel en Luxemburgo.